Los Juegos Paralímpicos de Invierno de 2022 llegaron a su fin este domingo con un espectáculo de fuegos artificiales durante la ceremonia de clausura en el Estadio Nacional de Beijing; conocido como Nido de Pájaro, tras nueve días de actividad.
El presidente del Comité Paralímpico Internacional (CPI), Andrew Parsons, pronunció un discurso centrado en el deseo colectivo de unidad y puntualizó que «las diferencias aquí no nos dividieron», hablando ante una audiencia que incluía al presidente chino, Xi Jinping, quien presidió la ceremonia.
Además, el dirigente deportivo mundial se pronunció, en ese sentido: “a través de esta unidad tenemos esperanza. Esperanzas de inclusión; esperanzas de armonía y; lo que es más importante, esperanzas de paz”, al tiempo que adicionó: “la humanidad espera vivir en un mundo donde prevalezca el diálogo”.
Los Juegos fueron un éxito, de acuerdo a Parsons: «10 días de acción, emoción y entusiasmo absolutos, en los que se contaron varias historias convincentes y se quedaron grabados momentos históricos”.
Uno de ellos fue el resurgimiento de la anfitriona, China, como nunca antes. De lo que fue una sola medalla en los Juegos PyeongChang 2018, tras de cuatro años de China para emerger como el mejor equipo con 18 medallas de oro.
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La velada comenzó con el escenario compuesto por pantallas LED que se transformaron en un símbolo visual central de un «tocadiscos» con un brazo de tono. Los abanderados de todos los países participantes, al son de la “Oda de la Alegría”.
Con la bajada de la bandera Paralímpica al final del Himno Paralímpico, interpretado por un violonchelista con discapacidad en las extremidades; llegó el momento de entregar el relevo de los Juegos a los próximos anfitriones: Milan-Cortina d’Ampezzo, en Italia, para 2026.
