El portavoz del Ministerio de la Defensa de Guatemala, Óscar Pérez, indicó este viernes que los dos militares que estaban desaparecidos después de una emboscada de supuestos narcotraficantes fueron localizados y están siendo trasladados a la capital.
El coronel, en declaraciones a la Agencia Efe, dijo que los dos infantes de la marina, que estaban en paradero desconocido desde el martes a mediodía y que fueron localizados el jueves, pasaron “más de 48 horas” en un pantano, por lo que tienen “infinidad de picaduras” de mosquito, aunque están estables.
Los dos militares, que formaban parte de una brigada de la marina que el martes a mediodía fue emboscada por un supuesto grupo de narcotraficantes cuando rastreaba un vuelo ilegal en el departamento caribeño de Izabal, fueron hallados a unos 250 metros de donde ocurrió la emboscada y un poblador local los ayudó a salir del agua con su lancha.
En este suceso, que llevó al Gobierno de Jimmy Morales a declarar un estado de sitio que debe ser aprobado por el Congreso, resultaron heridos otros tres militares, uno resultó ileso y otros tres murieron por “proyectil de arma de fuego de carga múltiple, posiblemente de escopeta”, como reveló la autopsia.
El portavoz del Ministerio de la Defensa explicó a Efe que, según los testimonios de los sobrevivientes, la brigada fue emboscada por un grupo de supuestos narcotraficantes, que llevaron retenidos a los militares a una escuela de la aldea Semuy II, donde supuestamente mataron a tres.
Estos fueron dentificados como Isaías Baleu Caal, de 22 años; César Augusto Leonel Seb, de 30, y Carlos Stiven Mayén Cabrera, de 30, y según el presidente Jimmy Morales fueron ejecutados, pues dejaron a uno sin rostro y a otro sin cabellera.
Los dos militares hallados “no corren peligro” y serán trasladados al Centro Médico Militar, donde se recuperan sus otros tres compañeros, dos de los cuales están estables y otro, en estado delicado, fue sometido este viernes a una segunda operación quirúrgica.
Precisamente este último, añadió el coronel, ha sido condecorado por el Ministerio de la Defensa con “la cruz de la marina” y el “roble de oro” en reconocimiento a sus acciones en el cumplimiento del deber, pues logró resguardarse a pesar de sus heridas en la casa de una mujer y desde ahí alertar de la situación.