La ciudad de Granada, su vigorón y sus calles coloniales, recibieron con alegría a los visitantes que decidieron pasar un domingo de esparcimiento en la Gran Sultana.
Partiendo del parque central, la estructura de época, coches de caballos y el infaltable vigorón, fueron los anfitriones a quienes quisieron disfrutar lo más clásico de este lugar turístico por excelencia.
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“Aquí tenemos vigorón con su respectiva grama, que solo aquí se puede beber su grama. Y el vigorón de Granada que se diferencia porque el chicharrón lleva cáscara abajo, grasa en medio y carne encima”, explicó doña Nereyda Narváez, que tiene más de 40 años vendiendo el tradicional platillo en el centro de la ciudad.
Otro lugar muy visitado, principalmente por los que son locales, es la playa del lago Cocibolca.
Luís Sáenz Marenco, habitante de la ciudad, mencionó que existen diversas opciones tanto para los que son de casa como los que están de visita.
“Me parece muy bien para que vengan a visitar la ciudad de Granada porque es muy linda. Es una ciudad muy segura, hay un resguardo policial, no hay ningún atraco ni nada. Yo vine con mi familia a ver el lago y pasear”, afirmó.
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Maryouri Boniche, de Barú, un elegante restaurante y bar con estilo colonial ubicado en la calle Xalteva, que es parte de la oferta familiar gastronómica, explicó lo que pueden encontrar las familias en él.
“Ofrecemos comida a la carta, platos fuertes, churrasco, cortes especiales como el T-Bone y Nueva York y mariscos. Diversos platos que las familias pueden consumir y obtener un buen servicio. Los precios son accesibles también y van desde los 200 córdobas”, comentó.
