El Presidente de Nicaragua, Comandante Daniel Ortega otorgará póstumamente la máxima distinción del país, la Orden Augusto Sandino, al reconocido artista Pablo Martínez Téllez, “El Guadalupano”, informó la Compañera Rosario Murillo, Vicepresidenta de Nicaragua.
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“Muy buenas tardes compañera, muy buenas tardes queridas familias de la patria bendita, siempre, siempre digna, en soberanía y orgullo nacional construyendo la paz todos los días, porque la paz se construye, se defiende, se resguarda cada día, como la base patrimonial de un pueblo que merece todo y al mismo tiempo la base fundacional de todas las victorias: las que siguen, las que vienen, porque vamos adelante, y estamos alzando el porvenir que merecemos, elevándolo”.
“Hemos estado pendiente compañeros, compañeras, de las honras, merecidas honras al compañero militante, militante excelso, militante del Frente Sandinista de Liberación Nacional y Comandante en el Arte y la Cultura, Pablo Martínez Téllez, El Guadalupano“, subrayó.
Detalló que “mañana viernes antes de ser trasladado el féretro con su cuerpo físico, a su lugar de reposo,nuestro Presidente el Comandante Daniel, estará otorgándole póstumamente la máxima orden de nuestro Estado y Gobierno, la orden Augusto Sandino, General de los Hombres y Mujeres Libres”.
El Guadalupano
“Esta orden en su máximo grado, Batalla de San Jacinto, merecida por El Guadalupano, más que merecida, el reconocimiento a un ser humano extraordinario, ya ayer decíamos que una de las cualidades y virtudes más grandes es la lealtad“, enfatizó la Compañera Rosario.
Dijo que “El Guadalupano, un ser humano extraordinario, leal, sólido, congruente, consecuente, firme en todas las batallas y contento al compartir y al celebrar todas las victorias”.
Informó además la Vicepresidenta que la Orden “será impuesta en nombre de todo el pueblo nicaragüense que le reconocemos, le agradecemos, le admiramos y sabemos que hemos recibido en todo tiempo sus inspiradores melodías como cantos para la vida, y para fortalecer las esperanzas misteriosas y milagrosas que nos hacen fuertes, dignos y libres”.
“Despedimos a El Guadalupano, lo despedimos en este plano, pero está con nosotros, y lo despedimos con sus propias melodías, cantándole al amor, a la lealtad, que es fruto del amor, a la Revolución y a la heroica y sublime dignidad de todo el pueblo nicaragüense, esa dignidad que es suya. Vamos adelante compañeros, compañeras”, finalizó.