Al menos ocho personas murieron y 15 resultaron heridas, cuando un terrorista suicida hizo explotar su cinturón en un mercado popular del barrio de Ciudad Sadr, en el este de Bagdad y cuya población es mayoritariamente chií, informó el comandante de la Policía de la capital iraquí, Salah al Bayati.
El ataque tuvo lugar después del anochecer en el cuarto día del mes sagrado de Ramadán, durante el cual los musulmanes no pueden comer ni beber en las horas diurnas y concentran sus actividades por la noche, cuando salen a comprar y reunirse con la familia y amigos.
Al Bayati agregó que las fuerzas iraquíes han reforzado las medidas de seguridad en torno al mercado de Yamila para prevenir otros ataques, ya que en algunas ocasiones estos tienen lugar de forma consecutiva.
Asimismo, el comandante de la Policía dijo que los heridos fueron trasladados al hospital y no ofreció información sobre la identidad del atacante suicida.
Por el momento, ningún grupo ha reivindicado el ataque contra el mercado de Yamila.
Ciudad Sadr ha sido blanco de numerosos atentados en el pasado, por ser el bastión de los seguidores del influyente clérigo chií Muqtada al Sadr y hogar de un gran número de personas que profesan esta rama del islam, mayoritaria en Irak.
El grupo yihadista Estado Islámico (EI), que se adhiere al islam suní, perpetró incontables ataques contra la comunidad chií de Irak, desde que ocupó amplias áreas del país a mediados de 2014 y hasta su derrota militar a manos de las fuerzas iraquíes a finales de 2017.
El Ramadán suele teñirse de sangre en Irak y en 2016 se produjo al final de este mes sagrado uno de los atentados más mortíferos, que dejó casi 300 muertos en el barrio chií de Al Karrada y fue reivindicado por el EI.
El año pasado, tras la expulsión del EI de Irak, la violencia se redujo notablemente durante el Ramadán, cuando un terrorista suicida intentó entrar en un parque abarrotado de personas en la zona chií de Al Shuala, en el noreste de Bagdad, y causó cuatro muertos