La temporada de huracanes en el Atlántico, que comienza oficialmente el próximo 1 de junio, podría tener una actividad “cerca” del promedio, con entre 4 y 8 huracanes, de los cuales entre 2 y 4 serían de categoría mayor, anunció hoy la Administración Nacional de Océanos y Atmósfera de EE.UU. (NOAA).
Las previsiones de la agencia estadounidenses de cara a la temporada ciclónica en la cuenca atlántica, que afecta durante seis meses a EE.UU., el Caribe y México, apuntan además a la formación de 9 a 15 tormentas tropicales.
La probabilidad de que la temporada sea de cerca del promedio normal alcanza el 40 %, detalló la NOAA en una conferencia de prensa telefónica encabezada por el secretario de Comercio de EE.UU., Wilbur Ross, al subrayar que sus proyecciones están respaldadas con un “70 % de confianza”.
De igual forma la agencia federal prevé un 30 % de probabilidades de que sea una temporada por “encima de lo normal” y el mismo porcentaje de que sea “por debajo de lo normal”.
La NOAA tuvo en cuenta para sus previsiones dos factores que se contraponen, como un “débil” fenómeno de El Niño, que puede rebajar la actividad ciclónica, y temperaturas de la superficie del mar más cálidas que el promedio en el Océano Atlántico y el Mar Caribe.
Esta temporada de huracanes la NOAA utilizará por primera vez la flota de satélites de observación de la Tierra, que incluye tres satélites operativos de próxima generación, y otras mejoras que “permiten una nación más preparada para el clima”, manifestó Neil Jacobs, el administrador interino de esta agencia.
Los datos “únicos y valiosos” de estos satélites alimentan los modelos de pronóstico de huracanes utilizados por los analistas para ayudar a los usuarios a tomar decisiones críticas con días de anticipación, indicó.
Ross resaltó que la NOAA usa estas herramientas de vanguardia para “ayudar a proteger a los estadounidenses contra la amenaza que representan los huracanes y los ciclones tropicales en el Atlántico y el Pacífico”.
La temporada ciclónica del Pacífico se presenta, según los pronósticos de NOAA, con un 70 % de probabilidad de actividad “por encima de lo normal”, según un pronóstico publicado este miércoles por la agencia estadounidense.
La temporada de huracanes en el Atlántico del año pasado tuvo tuvo 15 tormentas tropicales, de las cuales 8 se convirtieron en huracanes y 2 de ellos fueron de categoría mayor, es decir superiores al grado 3 en la escala Saffir-Simpson, con un máximo de 5.
El 2018 estuvo marcado por los ciclones Michael y Florence, de categoría cuatro y cinco, respectivamente, y que afectaron especialmente a EE.UU., donde dejaron decenas de muertes y pérdidas millonarias.