A los 27 años, Paris Jackson ha atravesado experiencias que le han dejado tanto profundas lecciones de vida como consecuencias físicas y emocionales. La hija del fallecido Michael Jackson, quien recientemente retomó la soltería, habló con total franqueza sobre uno de los episodios más difíciles de su vida, el cual le dejó marcas permanentes en el cuerpo.

La modelo confesó que los años de abuso de sustancias le provocaron una perforación en el tabique nasal, una condición que con el tiempo se hizo cada vez más evidente.
En un video publicado en redes sociales, Paris explicó: “Me di cuenta de que nunca abordé esto y a veces puede ser muy notorio. Tengo un silbido muy fuerte porque se puede oír cuando respiro por la nariz y eso se debe a que tengo lo que se llama un tabique perforado”.
La joven incluso iluminó una de sus fosas nasales para mostrar la cavidad hueca, señalando que era “ligeramente diferente de un tabique desviado” y atribuyendo el daño directamente al consumo de drogas.
Tras compartir su testimonio, lanzó un mensaje contundente a los jóvenes: “No consuman drogas, chicos. Cada quien tendrá la experiencia que necesita en la vida, pero no lo recomiendo porque arruinó mi vida”.
Paris también aseguró que no planea someterse a cirugía plástica para reparar el tabique, a pesar de convivir con esta condición desde los 20 años. “Tienes que tomar pastillas cuando te hacen una cirugía tan complicada y no quiero meterme con eso”, comentó, reafirmando su compromiso con la sobriedad, que mantiene desde hace casi seis años.
Según la Clínica Cleveland, un tabique perforado consiste en un agujero en el cartílago o hueso que separa las fosas nasales, el cual puede causar deformaciones visibles y dificultades respiratorias. Entre sus causas se incluyen enfermedades autoinmunes, exposición a sustancias químicas, infecciones o lesiones.
La revelación de Paris coincide con su reconocimiento en los Premios Friendly House en Los Ángeles, donde fue homenajeada por su labor en la rehabilitación de mujeres. Durante el evento, la modelo reflexionó sobre su proceso de recuperación, asegurando que dejar el alcohol le permitió reconstruir su vida y encontrar equilibrio. Su testimonio refuerza su papel como una voz inspiradora de resiliencia, autocuidado y conciencia personal.









