El huracán Iota provocó enormes estragos en la zona de la Costa Caribe Norte, en Puerto Cabezas en Bilwi; y en otros municipios de nuestro país. Miles de familias de estas localidades se quedaron sin un techo digno donde vivir. Ante esa problemática, el Gobierno de Reconciliación y Unidad Nacional, presidido por el comandante Daniel Ortega y la vicepresidenta Rosario Murillo, respondió rápidamente para asegurar el derecho a un hogar digno a miles de familias Nicaragüenses.
Antes, durante, y después del Huracán las autoridades han trabajado con eficiencia. Ante tal problemática, alrededor de cien mil laminas de zinc fuero enviadas para suplir la necesidad que dejó aturdidos a los pobladores de esa región.
Son múltiples los daños en la infraestructura del país provocados por los dos fenómenos que pasaron por Nicaragua; desde puentes colapsados, caminos destruidos, daños a las telecomunicaciones y a los servicios básicos; a pesar de todo, el país esta caminando a pasos agigantados para restablecer la normalidad.
Todas las alcaldías han activado un plan para borrar la huella que dejó Iota, se esta trabajando en la limpieza de las calles, mejoramientos de vías de acceso, y la restauración de servicios básicos. Además, las autoridades de salud han brindado atención a los mas vulnerables.
El alimento también se ha brindado en los diferentes albergues alrededor del país. Algo que hay que destacar, de igual forma, es la enorme solidaridad que muchas personas, y organizaciones han demostrado a lo largo de estos acontecimientos.
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